domingo, 30 de noviembre de 2014

ESPAÑA











¡Ay mi España romera!
¿Quién te anula y te enmaraña?
Y ella responde: ¡¡calaña!!
que quieren que sea ramera.

Partida estoy… por traidores
de partidos partidistas,
que actúan como cambistas
bajo el sello de señores.

Ellos se suben al carro,
al que llaman Democracia,
y por Dios y por su gracia…
se hacen dueños del cotarro.

Y al igual que champiñones
crecen el chulo y el secuaz,
rompiendo nación y paz,
sin plantearse cuestiones.

Han mancillado el recato,
han transgredido la Ley,
igual banqueros que el Rey,
que jueces y sindicatos.

No hay orden, ni justicia,
sólo palabras al viento,
las promesas son un cuento,
la realidad… avaricia.

Opera siempre el cinismo
y es transfusión el dinero,
que se ha vuelto un atavismo
para hacer el “cuanto quiero”.

El mediocre ocupa puestos,
sólo le basta callar
y ya de paso aceptar
que es bueno lo deshonesto.

¿Quién paga el desaguisado
de esta trágica comedia?
El obrero y jubilado
y también la clase media.

Y mañana ¿qué pasará?
Que pregunta más tontona,
cada cual en su poltrona…
y tranlarín… tranlarán.

Tinuco

jueves, 20 de noviembre de 2014

A MAL TIEMPO… BUENA CARA













No está serena la tarde,
pues tiene gran movimiento,
otra así, que Dios la guarde
en su santo pensamiento.

No encuentro dónde he dejado…
ni sé bien lo que dejé,
y eso que lo había apuntado…
pero… ¿dónde lo apunté?

Hace frío, está lloviendo
y la lumbre está apagada,
dejé la ropa tendiendo
y ahora la tengo mojada.

En el tejado hay goteras
y en el patio tengo charcas,
pero espera… espera… espera…
que no encuentro las albarcas.

¡¡Ay cuánta cosa me pasa!!
¡¡Madre mía que alboroto!!
Perdí las llaves de casa
y el pantalón tengo roto.

Me di un susto, casi chillo,
que una mano no encontraba,
la tenía en el bolsillo…
y ¡¡coño!! no me acordaba.

Me pone de mal talante
que todo se me haga un fardo,
ahora no encuentro los guantes,
ni cachava, ni tabardo.

¿Dónde he dejado el dinero?,
cuatro euros que me quedaban
para “la cuesta de enero”,
que hace subida y bajada.

¡¡Vaya tarde me dio el día!!
¡¡La madre que lo parió!!
Justo cuando esto decía,
pues me dije: se acabó.

Lo que no pueda encontrar
pues que aparezca a su antoje,
que en el Mundo “tie” que estar
aunque se pierda o se moje.

Que lo que importa es saber
que uno está vivo y lo nota,
que lo demás son “pelotas”
de las que ni caso hacer.

Así que ya estoy sereno
y en una silla me acuno,
sin saber muy bien si ceno,
o meriendo, o desayuno.

Y así quedo adormilado…
¿o estoy despierto soñando?
no me importa, sólo pido
no verme nunca quejando.

Tinuco

miércoles, 12 de noviembre de 2014

PARA DOLLY


Hola Dolly, yo te veo,
al igual que los demás.
En el alma te llevamos
y ahora contigo aquí estamos…
no te olvidamos jamás.

Pues con nosotros estás,
porque en verdad no te has ido,
ya que el recuerdo es un lazo
donde perdura el abrazo
del querer y haber querido.

En el Cielo te estoy viendo
y puedo escuchar tu risa,
y veo tu rostro bonito
que alegrando al Infinito
le da a Dios su mejor Misa.

Reina entre todas las Reinas,
Dolly… Condesa de Torre el Don,
Dama y Mujer excelente,
mi amiga de corazón…
aquí estás… siempre presente.

Sólo me queda añadir
un deseo muy humano
que te pido ¡por favor!:
Dale a Nany Campuzano
nuestro saludo de amor.

Tinuco

jueves, 6 de noviembre de 2014

N O V I E M B R E









Llegaste en tu período
presagiando tus celajes,
y elaborando paisajes
a voluntad de tu modo.

Los caminos vas llenando
con las hojas ya bruñidas,
mientras la sierra, callando
hace su entrega pasiva.

Y borra todos sus verdes,
pinta ocres y amarillos
y en el silencio pierden
los cantos del pajarillo.

Se vuelve el lobo atrevido,
cauto el corzo y el venado
y en las cimas se han tejido
blancos lienzos de un nevado.

Del monte, del monte vengo,
de besarle a la alborada,
con barro las botas traigo
y la cabeza mojada.

Acarreo una cestuca
de castañas y bellotas,
en el alma mil cosucas
y en el corazón mil notas.

Y encima, bien colocadas,
unas setas del cardillo,
que aunque estaban emboscadas
las delataba su brillo.

Desde lo alto de un cotero
veo en el valle mi morada,
donde tengo lo que espero…
el cariño de mi amada.

Desde allí contemplo el valle
que en la distancia es pequeño,
y observando los detalles
más que mirar… ¡casi sueño!

Llegan nubes, que al partir
cambian las sombras y luces,
son las caras y las cruces
de Noviembre en su existir.

Copos de nieve que avisan,
dicen que empiece el regreso,
yo me abrocho la camisa
y al monte le doy un beso.

Y si silbando subí
pues también bajo silbando,
mirando de cuando en cuando
si algo del cesto perdí.

Tinuco